Un grupo "pro vida" que todas las semanas se junta rezar frente a un consultorio en Tandil donde se practican abortos, denunció este martes por la tarde a un médico de ese lugar, quien terminó detenido mientras terminaba de interrumpir el embarazo de una mujer joven.
El hecho se conoció luego de que personal policial allanara la clínica de Cirugía Menor Ambulatoria Tandil (CIMET), ubicada en la calle 4 de abril al 1100 de esa ciudad bonaerense.
Cuando la Policía de la comisaría 2ª de Tandil entró, el aborto se había realizado minutos antes.
Una ambulancia del SAME trasladó a la chica a un hospital, donde fue atendida y, según confirmaron a este medio, está fuera de peligro.
Paralelamente, Cardoso quedó detenido, y acusado por el fiscal Damián Borean, de la UFI 12, del delito de aborto.
Y no se sabe cuándo le tomará declaración testimonial, ya que sigue internada. "No se ha adoptado un temperamento incriminante respecto de ella", explicaron las fuentes judiciales, quienes además aclararon que un equipo del Centro de Asistencia a la Víctima de la fiscalía contiene a la paciente.
Cardoso está aprehendido en función de lo que informaron del hospital y por los elementos que se encontraron en el lugar.
Del allanamiento participaron además peritos médicos, bioquímicos, peritos en rastros.
En una entrevista que le concedió al periódico El Eco de Tandil en marzo de este año, el médico había confesado que practica abortos "de hasta 12 semanas" y con la técnica de "aspiración".
Un grupo “pro vida” que todas las semanas se junta rezar frente a un consultorio en Tandil donde se practican abortos, denunció este martes por la tarde a un médico de ese lugar, quien terminó detenido mientras terminaba de interrumpir el embarazo de una mujer joven.
El hecho se conoció luego de que personal policial allanara la clínica de Cirugía Menor Ambulatoria Tandil (CIMET), ubicada en la calle 4 de abril al 1100 de esa ciudad bonaerense. Los agentes llegaron tras la denuncia de este grupo antiabortista y detuvieron al médico Germán Cardoso, quien en notas periodísticas con medios locales hechas meses atrás confesó que practicaba abortos a pesar de ser todavía un delito, y se mostró a favor de la legalización de la interrupción del embarazo.
Fuentes judiciales confirmaron a Infobae que el grupo de personas que rezaba en la puerta del lugar pretendió interrumpir el ingreso a la clínica de una mujer embarazada de aproximadamente cuatro meses que iba a interrumpir su embarazo. La gente “pro vida” intentó convencerla de que no lo hiciera pero la joven, de unos 25 años, entró igual y fue allí cuando denunciaron el hecho.
Cuando la Policía de la comisaría 2ª de Tandil entró, el…